martes, 16 de febrero de 2016

Calles de Madrid

1)
Un día caí
por la calle del Bonetillo,
por la espalda del mundo.

Desapareció el Sol y el miedo,
las bóvedas y la pintura aislante.

Fueron años de verdor y lágrima,
de luz tenue y rima rosada.
Años de andamios y basura
acumulándose en la puerta.

Cuando alcancé el palacio,
supe que había muerto.


2)
Tú naciste en Cascorro,
con los zapatos nuevos de un rojo reluciente
y la camisa tres veces desabotonada
para saber mostrar el vello y el oro
en esa amalgama de poder atávica.

Juegos de pelotas que hablan solas,
recreativos sin un céntimo,
perros clonados atados a ombligos con piercing
y tatuajes como dios manda.

Olor a gallinejas y baba de caracol,
gentío, bocadillos de chorizo,
cajas de carton a los pies del héroe,
palomas negras señaladas por neurasténicos,
vecinos que no saben ver el mundo
con ojos sin alcoholizar,
fritanga y zapateados, balcones indiscretos.

Tú naciste gitano, desheredado, subsidiado, chamarilero,
entre las dos medianeras de entrebarrios;
y qué orgullo sientes.